Un bebé es transportado a Lullaby Land, donde los chupetes crecen en los árboles, los pañales, los biberones y los orinales marchan en un desfile, y el perro a cuadros cobra vida. Se adentra en la cueva de "mantener fuera", llena de cosas como tijeras, cuchillos y plumas estilográficas que no son para bebés y comienza a romper relojes con martillos y jugar con fósforos gigantes. Los fósforos lo persiguen; el bebé escapa montando una pastilla de jabón a través de un estanque, pero el humo de los fósforos se convierte en hombres del saco. El benevolente hombre de arena, vestido como un mago, ve al bebé escondido y hace su magia, llevándonos de regreso a la verdadera guardería.